Hace cien años vivió un escarabajo que era muy rico. Era el jefe en toda su comunidad. Todos su súbditos le traían estiércol para él, pero nada de eso le hacía feliz.
Lo que le hacía feliz de verdad era fabricarse sus propias bolas de estiércol, pero no podía ya que no le dejaban los campesinos irse. Un día decidió irse pero sin nada se fue y no se llevo nada.
Desde entonces siempre estaba tomando el sol en el puerto,un buen día llegó hasta el el escarabajo más rico de todo y le preguntó si quería algo, y por las palabras que va a decir se convirtió en famoso.
-Lo único que le voy a pedir es que se aparte que me está quitando el sol.
Cuentan las antiguas historias que ese escarabajo aun sigue caminando por nuestras calles.
Sergio Muñoz 6º B
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